El Congreso Internacional de Maíz recibió a uno de los productores más destacados de México, Ernesto Cruz, quien compartió su vasta experiencia en el cultivo de maíz, dejando una profunda impresión en los asistentes. Originario de Jalisco, México, Ernesto ha dedicado su vida a la agricultura, especializándose en el cultivo de maíz y obteniendo rendimientos que han roto récords mundiales.
Ernesto Cruz proviene de una larga tradición familiar de agricultores, continuando un legado que ha pasado de generación en generación. "De mi abuelo agricultor, mi padre agricultor, mi esposa agricultora y yo soy agricultor, y mis hijos también", compartió durante la entrevista, destacando el profundo arraigo de su familia en la agricultura.
Durante la entrevista, Ernesto relató los desafíos que enfrentó en su país debido a la chicharrita del maíz, un problema que afectó gravemente los cultivos entre 2003 y 2007. Este insecto es conocido por ser un vector del fitoplasma, una bacteria que puede devastar los cultivos de maíz.
Ernesto explicó que, para resolver este problema, fue necesario adoptar un enfoque integral que incluyó el uso de antibióticos, algo que considera crucial pero que no ha visto mencionado en las prácticas agrícolas de Argentina. "Nosotros tuvimos un problema muy, muy fuerte hace 18 años... mientras no usen antibióticos no van a poder acabar con el problema", enfatizó, señalando que este enfoque fue fundamental para controlar la crisis en México.
Uno de los momentos más destacados de la entrevista fue cuando Ernesto compartió los impresionantes rendimientos que ha logrado en sus cultivos. En su finca en Jalisco, alcanza un rendimiento promedio de 32-33 toneladas por hectárea. Sin embargo, su mayor logro fue alcanzado en China, donde estableció un récord mundial de 44.4 toneladas por hectárea en 2019. "Es récord mundial", afirmó con orgullo.
Ernesto no solo compartió sus experiencias, sino que también ofreció una perspectiva alentadora para los productores argentinos. Expresó su admiración por los recursos naturales y la actitud trabajadora de los agricultores locales, pero también les lanzó un reto.
"La verdad, yo tengo envidia de la buena de Argentina, porque tiene unos recursos envidiables y gente muy, muy, muy positiva y muy trabajadora", comentó. Sin embargo, subrayó que para alcanzar su verdadero potencial, los agricultores argentinos deben superar la mentalidad de que altos rendimientos son imposibles de lograr. "Mientras no salgan de la realidad de que no es posible producir 15 toneladas... Argentina no lo va a poder hacer", advirtió, aunque también aseguró que "el límite es el cielo, sin problema".
Cruz finalizó su intervención en el Congreso con un llamado a la acción para los agricultores argentinos. Insistió en que, para mejorar los rendimientos, es esencial que los productores crean en su capacidad de superar las expectativas y se atrevan a salir de su zona de confort. "Lo más difícil es que la gente crea que puede mejorar", afirmó, resaltando la importancia de la mentalidad en la agricultura moderna.
Ernesto Cruz dejó claro que, con los recursos adecuados y un cambio de mentalidad, Argentina tiene el potencial de convertirse en un líder mundial en la producción de maíz, siguiendo el ejemplo de su éxito en México.
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