La Argentina verá reducida su cosecha de trigo en casi un 50% versus el año pasado, según un relevamiento difundido por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Para esta entidad, el país tendrá la peor producción de este cereal de los últimos siete años.

Respecto de lo obtenido el año pasado, el faltante en valor de exportación versus el ciclo agrícola pasado ronda los US$4500 millones.

Según la entidad, contra los 23 millones de toneladas de la campaña anterior, en la próxima cosecha, que ya se inició en regiones del norte, se recolectarán 11,8 millones de toneladas. Esta entidad venía estimando hasta octubre pasado 13,7 millones de toneladas. La debacle del cereal es consecuencia de la sequía en amplias regiones productivas y, además, de heladas tardías que impactaron sobre el llenado de grano de los cultivos. A modo de ejemplo, en octubre último hubo cuatro heladas.

Según fuentes del mercado, si se compara la producción estimada, de 11,8 millones de toneladas, contra los 23 millones del último ciclo, el faltante, de 11,2 millones de toneladas, a valores de exportación representan más de US$4500 millones.

La situación representa un golpea al campo y también para el Gobierno, necesitado de dólares y que viene de prorrogar embarques por un año para evitar una tensión en los precios internos. En rigor, los exportadores tienen anotadas ventas al exterior por casi 9 millones de toneladas. El consumo interno, según los años, ronda los 6 millones de toneladas. De esta manera, existe una fuerte tensión en torno del balance para el cultivo.

"La falta de agua ya era una limitante a la siembra (restó 1 millón de hectáreas respecto del área implantada en 2021), de todas formas se esperaba un horizonte productivo de trigo para argentina en torno a los 18 millones", indicó la BCR. En rigor, se fueron sucediendo diversos recortes en la producción triguera hasta el número esperado. "A pesar de que se aplicó todo la tecnología necesaria para que el potencial triguero supere los 18 Mt, el escenario actual del trigo argentino pasa por una enorme incertidumbre y puede seguir habiendo nuevos recortes", alertó la entidad.

Los rindes esperados para el cultivo estarán no sólo por debajo del promedio de los últimos cinco años, sino cerca de 2008, año de una dramática sequía y que dejó una producción de trigo de solo 7,5 millones de toneladas.

"Esto es lo que se refleja en el rinde país: la estimación de noviembre es de 23,3 qq/ha (vs 31,5 qq/ha de promedio en los últimos 5 años). Para encontrar un rinde más bajo hay que retroceder hasta la fatídica campaña 2008/09: el rinde país estuvo por debajo de los 20 qq/ha; Argentina produjo tan solo 7,5 Mt", recordó.

Previsión

En medio del duro escenario climático, desde el Gobierno señalaron, por su parte, que "en los próximos días se desarrollarán eventos de lluvias y tormentas en amplias regiones productivas del país (centro y norte)".

"Serían las mejores lluvias a nivel regional de la primavera. Alcanzarían zona núcleo. Podrían significar que se detenga la caída de expectativas de producción de trigo y el inicio acorde a la acumulación de agua en el suelo de la siembra de cosecha gruesa", agregaron.