Las subas de la hacienda encuentran otra vez un techo en los mostradores de las carnicerías
En Cañuelas, novillitos y vaquillonas tuvieron un retroceso del 3 a 4%, luego de una serie de ruedas alcistas. Las subas no son convalidadas por los consumidores y además ingresó hacienda de menor calidad.
En la última rueda comercial previa a las elecciones, el consumo promediaba los $1.100 en novillitos y vaquillonas, para luego experimentar algunas ruedas comerciales con tendencia alcista y cotizaciones máximas que llegaron a superar la barrera de los $ 1.200.
Este nuevo escenario de precios se trasladó a las pizarras de las carnicerías, que en los últimos días registraron un fuerte incremento en el valor de la media res que bajan los matarifes.
Un dato a tener en cuenta –y que marcará el comportamiento del negocio en los próximos meses- es que además de las variables macroeconómicas, empezó a hacerse sentir el faltante de hacienda.
En este marco, luego de algunos ingresos por debajo de la habitual en Cañuelas, el volumen de hacienda comercializado comenzó a retornar a los valores normales para esa plaza.
Como muestra, el pasado viernes 24 de noviembre llegaron 12.958 cabezas y hoy se pusieron a la venta unos 12.523.
Así, tras varias ruedas alcistas, el escenario de precios quedó claramente dividido en dos. Por un lado, un consumo que por el momento encontró un techo y retrocedió entre un 3% y 4%.
En la vereda opuesta, las categorías destinadas a la exportación mostraron firmeza, a partir de una menor disponibilidad en novillos y vacas.