Desde la Cámara Argentina anticipan un 2024 favorable para el mercado inmobiliario rural
"Hasta ahora, las primeras e incipientes señales que manda el mercado han sido positivas”, señalaron desde la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales. Entre los operadores del negocio preocupa la elevada inflación y la inseguridad
“Durante el 2023, aun siendo un año electoral, pudo verse más actividad que en otros años electorales”, señalaron desde la cámara presidida por José María Bauzá.
Por el momento y más allá de este optimismo, identificaron dos problemas que pueden repercutir de manera negativa en los negocios: la elevada inflación que sufre la economía y la inseguridad.
Como atenuante, remarcaron que la suba en la cotización internacional de los commodities y las expectativas de que se mantengan estos valores con buena demanda es una muy buena noticia para los campos agrícolas.
“La mala noticia es que nuevamente se aumentaron las retenciones a muchos productos del agro”, advirtieron. Con respecto a la ganadería, destacaron que se encuentra un peldaño por debajo en materia de expectativas en comparación al agro, pero se mantiene la demanda china y mejoraron los precios a nivel local”, sostuvieron.
De este modo, el mercado inmobiliario rural estuvo más activo para campos agrícolas, y con una menor demanda para campos mixtos y ganaderos.
Para la entidad que nuclea a las inmobiliarias rurales, es clave que la Ley de Tierras haya sido incluida en el DNU que en estos días se está tratando a nivel legislativo.
“Pero no por la mera derogación vendrán inversores, vendrán cuando la Argentina entre en la mira de los mismos por su seguridad jurídica, seguridad económica, estabilidad y un sistema cambiario libre. Es decir, esto sucederá recién cuando Argentina sea un país que reúna las condiciones para invertir”, argumentaron.