Desde el CAR Córdoba de CONINAGRO expresamos de manera contundente nuestro rechazo a los Derechos de Exportación (DEX o “Retenciones”) y mucho más a un aumento de los mismos, pues consideramos son medidas sólo recaudatorias injustas y que distorsionan el mercado, ya que -entre otras características negativas- gravan el volumen total de producción comercializada sin tener en cuenta las circunstancias de cada productor, como por ejemplo la inversión necesaria y la rentabilidad real obtenida. Estas son viejas recetas para viejos problemas.

Los productores de todas las escalas y producciones diversas necesitamos igualdad de condiciones como punto de partida para ser competitivos lealmente, acceso a fuentes de créditos y a costos razonables para incorporar tecnologías que nos permitan incrementar la productividad cuidando el ambiente y no queremos ser discriminados, como por ejemplo por las medidas del Banco Central con respecto a quienes producen trigo y/o soja.

También debe considerarse que nuestros insumos son en su mayoría importados, lo que afecta a nuestros costos los impuestos aplicados al dólar establecido para ellos. Incrementar productividad es la meta que nos otorga sustentabilidad a una producción en gran volumen general y con productores agropecuarios en el interior lo que a su vez generaría más divisas para nuestra Argentina, que tanto las necesita (tal como quedó demostrado con la sequía que atravesamos).

Para tomar ese rumbo certero hacia las 200 millones de Toneladas como país necesitamos reglas claras en el corto y largo plazo, que deberían ser planteadas por el Gobierno desde su inicio, ya que confiamos en el punto de inflexión que significa y en quienes estamos esperanzados.

Queremos resaltar la importancia de nuestro sector para el desarrollo de las comunidades rurales, trabajo y el arraigo en el interior del país, para lo cual es imperativo que nuestros genuinos ingresos queden en nuestro ámbito de decisión para dar movimiento económico a localidades y provincias donde vivimos.

Entendemos la difícil situación que atraviesa el país y apoyamos las medidas tendientes al equilibrio fiscal necesarias, apelamos entonces que todos los aportes sean equitativos entre los actores económicos y que sea también variable de ajuste en la ecuación, el gasto público.

No podemos olvidar que muchos de nuestros productores votaron a favor de la reducción y eliminación de las retenciones prometidas.

Por lo tanto, pedimos soluciones más creativas que no dañen los tejidos productivos, nos den previsibilidad, nos dejen desarrollar nuestro potencial o que al menos en base a la tan mentada y necesidad compartida de libertad, no entorpezcan nuestro camino para ello.

En sintonía con lo que sabemos necesita el país en estos duros momentos mañana NO PARAMOS, y seguimos apostando con todo nuestro esfuerzo en trabajo e inversiones para construir juntos la Argentina que soñamos para nuestros hijos.