El impuesto del inmobiliario rural 2025 no debería superar el 50%
La asamblea realizada el miércoles en Marcos Juárez dejó en evidencia la disconformidad del sector agropecuario ante el aumento del impuesto inmobiliario. Hugo Biga, productor local, detalló las preocupaciones de los productores y su desconfianza hacia las entidades gremiales.

Hugo Biga - Productor de Marcos Juárez - Parte 1
Hugo Biga - Productor de Marcos Juárez - Parte 2
Un aumento polémico y las consecuencias para los productores
El miércoles pasado, productores rurales de la región se reunieron en Marcos Juárez para discutir el incremento del impuesto inmobiliario rural. Hugo Biga, uno de los participantes, expresó su rotundo desacuerdo con el aumento, calificándolo de "alevoso" y perjudicial para los productores.
“El aumento es completamente desproporcionado. No podemos aceptar que en febrero se discutan decisiones que se tomaron en octubre y noviembre del año pasado”, comentó Biga, quien añadió que el aumento había sido "acompañado por la Mesa de Enlace" sin una consulta adecuada al sector.
La falta de representación: un problema creciente
Uno de los puntos más críticos que se mencionaron durante la asamblea fue la falta de representación por parte de las entidades agropecuarias. Según Biga, la Mesa de Enlace Córdoba no está defendiendo los intereses de los productores rurales como debería. Esto fue evidente durante la asamblea, donde se notó el malestar entre los presentes.
"No nos estamos sintiendo representados. Las entidades como la Mesa de Enlace no están haciendo su trabajo", afirmó Biga, visiblemente frustrado con la situación. Aseguró que muchas de las personas presentes en la reunión eran sus antiguos compañeros de trabajo, pero la percepción sobre las políticas actuales ha cambiado.
El origen de la Fundación Mesa de Enlace y sus implicancias
Biga también hizo una fuerte crítica a la Fundación Mesa de Enlace, mencionando que fue creada con un propósito diferente al que actualmente está llevando a cabo. En sus palabras:
“La Fundación Mesa de Enlace se creó con la finalidad de acompañar al gobierno, no para defender al sector agropecuario. Yo fui parte de su creación, y la idea original era que los fondos del impuesto inmobiliario quedaran bajo la gestión del campo, no del gobierno.”
El productor destacó que el uso del Fondo Agropecuario, que surgió como parte de los ingresos generados por el impuesto inmobiliario, ha sido manejado de manera equivocada. En lugar de destinar esos fondos para crear equipos técnicos y lobby para trabajar en la legislatura, según Biga, se ha priorizado su distribución.
“No se trata de dividir el dinero, se trata de generar fuentes de ingresos que fortalezcan la defensa del sector. Pero en lugar de eso, algunos están más preocupados por repartir la torta que por trabajar para el futuro del campo”, comentó.
Un panorama económico complicado para los productores
Biga también remarcó la difícil situación económica que atraviesa el sector agropecuario. La baja en los precios de los commodities, el aumento de los costos de producción y la presión fiscal constante están afectando a los productores, especialmente a los pequeños y medianos.
“Estamos ante un sector que ya está golpeado. Los comodities bajaron un 40%, los costos de producción subieron enormemente, y ahora nos suben los impuestos”, explicó Biga, añadiendo que esto está llevando a una desaparición de los pequeños y medianos productores. Además, alertó sobre el impacto de estas políticas en los grandes grupos agropecuarios, que también enfrentan dificultades.
El momento clave de la reunión: cuando los productores debieron levantarse
Un momento decisivo durante la reunión fue cuando el Ministerio de Agricultura de Córdoba anunció que en el presupuesto para 2025 el aumento del impuesto sería del 172%. Según Biga, ese fue el punto en el que los representantes de la Mesa de Enlace debieron haber abandonado la reunión, ya que el incremento era excesivo y llegaba en un momento de profunda crisis para el sector.
"En ese momento, debieron levantarse e irse. El campo ya está golpeado, y no podemos aceptar un aumento tan drástico. Estamos en un momento de crisis, no de ganancias", destacó Biga, subrayando que el aumento perjudicaba aún más a un sector que ya estaba atravesando muchas dificultades.
¿El futuro del campo?
Biga concluyó su intervención haciendo una advertencia sobre el futuro del campo argentino. Según él, la actual situación es insostenible para los productores. La combinación de costos elevados y bajas recaudaciones podría llevar a una crisis más profunda, afectando a toda la cadena productiva.
“Esto es una vaca lechera que todos quieren ordeñar, pero si no la alimentan, se va a quedar sin comida”, advirtió Biga. Además, mencionó que "los pequeños productores están desapareciendo" y que la situación podría empeorar si las políticas fiscales y económicas no cambian.
El impacto del aumento del impuesto inmobiliario
Hugo Biga expresó su desacuerdo rotundo con el aumento del impuesto inmobiliario rural de la provincia de Córdoba, que en algunos casos ha llegado a incrementarse hasta un 300%. "Este año, el aumento fue de entre un 172.5% y un 230% en algunos casos, lo cual es completamente excesivo", comentó Biga. Para él, el ajuste del impuesto no tiene justificación, especialmente considerando que el presupuesto del año 2024 ya había sido ajustado en un 202.5%.
Biga explicó que, según su experiencia, el impuesto inmobiliario debería estar ajustado por la inflación anticipada, y subrayó que este tipo de ajustes ya estaban contemplados antes de que se informara el aumento actual. "El impuesto 2024 ya había sido ajustado en un 202,5%, y en mi caso personal, el aumento fue del 218,5%", aseguró Biga.
Descuentos por buenas prácticas agropecuarias: ¿beneficiarios reales?
Uno de los puntos más controversiales que tocó Biga durante la entrevista fue el sistema de descuentos por buenas prácticas agropecuarias. Según el productor, la medida no beneficia realmente a quienes trabajan la tierra. "El 70% de la tierra en la provincia de Córdoba no la trabajan los propietarios, sino gente que lo arrienda", explicó Biga. En su opinión, los dueños de tierras no son los que realmente se benefician de las buenas prácticas agropecuarias, lo que genera una injusticia para quienes se encargan de las labores en el campo.
"Estamos beneficiando al dueño de la tierra, no a los que realizan las tareas del campo, y eso está completamente mal", añadió Biga, dejando en claro su desacuerdo con la distribución de beneficios.
El descontento con las políticas del gobierno y la falta de acción gremial
Biga también criticó fuertemente a los actuales representantes del sector agropecuario, a quienes considera incompetentes en su gestión. Según el productor, la falta de asesoramiento y una postura firme frente al gobierno ha llevado a una mala representación de los intereses del sector.
"Hoy, los dirigentes deberían quedarse en su casa si no se asesoran correctamente", expresó Biga.
En su crítica hacia la Mesa de Enlace, Biga argumentó que los representantes no han defendido de manera adecuada al sector agropecuario. "El trabajo que nosotros presentamos con comparativas de provincias como Santa Fe y Buenos Aires fue rechazado sin fundamento", señaló. Biga también remarcó que la falta de acción gremial efectiva ha generado una desconfianza creciente entre los productores.
¿Una rebelión fiscal a la vista?
Hugo Biga advirtió sobre las posibles consecuencias del descontento generado por los aumentos impositivos. Según él, la situación podría derivar en una rebelión fiscal por parte de los productores. "No estoy tan seguro de que el 40% de los productores haya pagado", dijo Biga. "Muchos no pagan no porque no quieran, sino porque no pueden".
En cuanto a las medidas del gobierno para facilitar el pago de impuestos, Biga cuestionó la viabilidad de las opciones de pago fraccionado. "¿De dónde sacás el dinero si no tenés? ¿Vas a robar un banco para pagar un impuesto?", se preguntó Biga. Para él, las formas de pago propuestas no son suficientes para aliviar la carga de los productores, quienes se ven forzados a postergar el pago de impuestos debido a su situación económica.
El papel de los productores agropecuarios: ¿responsables de la situación?
Biga se refirió a los productores agropecuarios como responsables en parte de la situación actual. Según él, los productores no están aportando lo suficiente a la causa gremial, lo que limita su capacidad de exigir cambios y mejoras.
"Si no ponemos una cuota social, no podemos exigir nada", aseguró Biga.
El productor lamentó que, mientras los productores continúan enfrentando cargas impositivas elevadas, se permita la evasión de impuestos a través de sistemas como el blanqueo de capitales. "¿Son premiados los que evadieron con los blanqueos?", se preguntó, mostrando su indignación con las políticas fiscales que favorecen a los evasores.
La necesidad de una reforma urgente
Hugo dejó claro que la situación del sector agropecuario necesita cambios profundos. Según él, es fundamental que los productores se organicen y aporten económicamente a sus gremios para poder exigir una representación efectiva que trabaje por sus intereses. Además, instó a que se realicen reformas en el sistema impositivo y en la distribución de beneficios de las buenas prácticas agropecuarias.
"Si algún día hiciéramos un mea culpa y aportáramos una pequeña cuota, podríamos exigir a las personas que nos representan", concluyó Biga, dejando una reflexión sobre la importancia de la unidad y la responsabilidad de los productores para mejorar las condiciones del sector.