Según el reporte, “hace años que el trigo no llegaba así a las semanas previas de la floración”. Técnicos consultados remarcaron que habría que remontarse a campañas como la 2017/18 o la 2021/22 para ver cultivos con un estado similar.

En localidades como María Susana, la mayoría de los cuadros podrían alcanzar rindes de 50 a 65 quintales por hectárea (qq/ha), con algunos lotes que muestran potencial de hasta 80 qq/ha. En el área de Corral de Bustos destacan trigos en hoja bandera con más de 500 espigas por metro cuadrado.

A modo de contraste, en la misma fecha del año pasado un tercio de los lotes se encontraba entre malos (10%) y regulares (22%).

El riesgo de las enfermedades

El panorama de abundantes lluvias y alta humedad también genera preocupación. Desde la GEA advirtieron sobre la posibilidad de fusariosis en espiga, por lo que sería clave contar con una ventana sin precipitaciones en la primera parte de octubre.

“El trigo está fantástico. Después de tantos años malos, nos da miedo ver lo bien que pintan este año. En 15 días va a estar florecido y es muy importante que del 1 al 10 de octubre no tengamos lluvias”, señalaron asesores de la zona de Camilo Aldao.