Se trata de una iniciativa que apunta a alcanzar un volumen de producción de 25 millones de toneladas del cereal, una cifra nunca lograda en la historia argentina para conseguir también otros hitos:

• Que se industrialicen y transformen en harinas, para consumo interno y exportación, 9 millones de toneladas (actualmente son 7,5 millones, con una capacidad instalada de la industria molinera de 12 millones)
• Que se exporten como granos 16 millones de toneladas (el récord es de 13 millones y el promedio de los últimos años ronda los 12,2 millones).

Para el Gobierno, es una oportunidad de seguir haciendo crecer una cadena que hoy abastece a nivel mundial a 46 países y que involucra a alrededor de 38.000 productores a nivel nacional.

El trigo y las brechas produtivas

En este marco, el Plan 25 MT –que tendrá una duración inicial de tres años (prorrogables)– incluye la creación de un programa denominado “Cerrando Brechas Productivas”.

Esa es la apuesta para incrementar la producción: acercar los pisos de rendimiento a los techos, por medio de la incorporación de tecnología y de mejoras genéticas.